Hola a todos.
Soy Marivi Lastra y hoy vamos a hablar de neuromarketing. Te explicaré de qué se trata y te enseñaré una sencilla estrategia que podrás aplicar en tu sitio web.
¿Alguna vez te ha pasado que saliste a comprar algo y terminaste comprando otra cosa? O tal vez, te hiciste el propósito de perder peso, tienes un encuentro cercano con esa comida no muy saludable, o con ese chocolate que tanto te gusta, y se te olvida todo… Y si nos preguntamos por qué lo hicimos, la mayoría de las veces no sabemos qué responder, así que comenzamos a dar excusas y justificaciones.
Este precisamente es el trabajo del neuromarketing, proporcionar información acerca de lo que realmente atrae la mente del consumidor, y no de lo que “dice que quiere”. Pero ahora vamos a explicar en términos sencillos de qué se trata.
¿Qué es el Neuromarketing?
El neuromarketing es una ciencia que utiliza los descubrimientos que hacen las neurociencias, sobre cómo decide nuestro cerebro, para aplicarlo a las diferentes áreas del marketing. Las neurociencias involucran tanto estudios biológicos como estudios psicoantropológicos. Los primeros nos proporcionan información acerca de aquellas conductas que son comunes a todos los seres humanos, mientras que los segundos nos enseñan acerca de los factores culturales propios de un país o región que influyen en nosotros.
No es lo mismo vender un producto en China que venderlo en España, porque la cultura modifica nuestros patrones de compra.
¿Cómo decide nuestro cerebro?
Seguramente habéis escuchado alguna vez sobre la Teoría de los tres cerebros o Cerebro Triúnico propuesta por Paul MacLean en los años sesenta, donde proponía que en realidad tenemos tres cerebros que funcionan en conjunto. Hoy en día se sabe que tenemos más de tres cerebros, pero por su sencillez esta teoría se sigue utilizando en neuromarketing para explicar cómo decide nuestro cerebro.
Estos tres cerebros son:
- El cerebro racional, que es la mente lógica, también llamado neocórtex, que representa la parte consciente de nuestra mente. Este es el único de los tres cerebros que habla, por lo tanto, es el que racionaliza en palabras. En nuestros ejemplos anteriores, este cerebro es el que dice “mejor comenzamos la dieta la semana que viene”.
- El cerebro límbico, es el cerebro emocional, también llamado subconsciente. La neurociencia explica que todo lo que compramos lo hacemos para reducir un miedo o para obtener placer, así que este es el cerebro que nos impulsa a comer o beber cuando estamos tristes o deprimidos.
- El cerebro reptil, está representado por la mente inconsciente, y se encarga de la supervivencia, la reproducción, la defensa y la protección. Sus reacciones están representadas por códigos reptiles. Está programado para ahorrar energía, por eso se le llama cerebro mediocre, y explica por qué es tan difícil cambiar. Por ejemplo, cuando la alarma del reloj suena en la mañana, y la ponemos 10 minutos más tarde. ¿Te suena familiar?
Como observas en la imagen, la mente racional sólo influye un 15% dentro del proceso de toma de decisiones, mientras que el otro 85% tiene lugar a nivel de la mente subconsciente e inconsciente. Dicho de otra manera, los cerebros límbico y reptil deciden, mientras que el cerebro racional justifica la decisión que los otros dos tomaron. Esta información ha cambiado radicalmente la manera de hacer los estudios de marketing, ya que significa que la gente realmente no sabe por qué compra lo que compra.
En este sentido, el reconocido divulgador de neurociencias aplicadas, Jürgen Klaric, en su video “Neuromarketing. El principio de los tres cerebros”, nos explica que la neurociencia aporta información de mucho más alcance que la obtenida con métodos tradicionales como los focus group o grupos focales, donde se le pregunta a la gente lo que quiere o lo que le gusta de un producto o marca.
Ejemplo de cómo aplicar neuromarketing en tu sitio web
El neuromarketing ha verificado que la mente siempre busca conectar con los ojos de las personas que tenemos delante. Esto también es válido cuando vemos una foto de alguien, por lo que se puede usar en todo tipo de publicidad. Os vamos a mostrar un sencillo ejemplo de cómo puedes usarlo en tu sitio web.
Observa las dos imágenes superiores. Ahí tenemos dos ejemplos. En la foto de la parte superior los ojos miran hacia el título que queremos resaltar, llevando a tu cerebro a mirar allí de forma inconsciente. Mientras que en la parte inferior tenemos otro ejemplo, pero la mirada está puesta hacia el lado izquierdo, espacio totalmente opuesto al lugar donde está el título. Debido a las neurociencias sabemos que en este segundo ejemplo, la vista del lector se dirigirá de manera inconsciente lejos del título, por lo que es más eficaz usar la imagen de la parte superior. Ahora podéis probar, mirad las imágenes atentamente, por separado, y decidme hacia dónde se dirige vuestra mirada en cada caso.
Bueno, espero que os haya gustado este post sobre neuromarketing, y si es así, nos encantaría que lo compartierais en vuestras redes sociales.
Muchas gracias a todos por seguirnos!!
Hasta pronto!!
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